Día 21: I see you at the movies

Este diario cumple hoy —que ya es antier y que corresponde al jueves 9 de abril— tres semanas aunque yo ya llevo en aislamiento un mes, que se pasó en un abrir y cerrar de ojos. Independientemente de lo rápido o lo lento que ha sido para cada uno y de lo fácil o lo difícil que nos resulta, es impresionante como estamos ya instalados en esta nueva realidad circundante en la que de pronto, no tenemos tiempo para nada aunque no hayamos salido de casa.
Justo escuchaba hace poco una entrevista en un noticiero sobre la comida donde, además de que dijeron que ahora resulta que casi todo el mundo está cocinando de nuevo, aportaron dos datos de la población mexicana que me sorprendieron: un sector está instalado en los antojitos mexicanos —comida para la que, en lo cotidiano, casi nunca tenemos tiempo y con la que ahora nos estamos dando vuelo por puro antojo, ¡cómo no!— mientras otro sector está en la comida de confort o delicatessen, por lo que aceitunas, mejillones y abarrotes similares han tenido mucha demanda últimamente. De entre mis contactos en redes sociales donde tengo amigos de aquí y allá, lo que sé es que varios le hemos entrado con ímpetu a la cocina y parece que el intercambio de recetas se ha incrementado... lo cierto es que todo se debe a que ¡por fin, tenemos tiempo!
No sólo es la disponibilidad o la oportunidad para pasar un rato en la cocina, sino también tiene que ver con el autocuidado. Necesitamos hacer actividades que nos permitan escapar de lo cotidiano, que nos proporcionen alegría y que nos relajen. Que cada quien le haga como pueda y por eso, es que en estos días, yo estoy instalada en el "silbando al trabajar" y en la cocinada como si cualquier cosa...
Sin embargo, hace cosa de una semana me registré en TikTok, esta plataforma de origen chino en la que se comparten videos de corta duración —hasta de un minuto— y que lleva ya cuatro años en el mercado pero no es sino hasta ahora que se ha popularizado en el mundo y en particular, en nuestro país —dejo aquí algunas métricas que encontré. En lo personal, fui a investigar por pura curiosidad.
La primera vez que entré me pareció una Caja de Pandora pues encontré un montón de videos de ese tipo de humor muy popular en México que a mí no me gusta nada: que tiende al insulto, a la discriminación y así. Por alguna razón que no tengo muy clara aún, la siguiente vez el panorama fue diametralmente opuesto y desde entonces hasta ahora, así ha continuado —tengo sospechas de que el feed "aprende" lo que te interesa y que francamente, a estas alturas, ni me sorprende...
Así que en estos días, miro TikTok donde resulta que hay varios retos encantadores y algunos francamente simpáticos relacionados con cantar o bailar que, literal, me encantan porque veo a las personas con humor que se ríen de sí mismas, la gran mayoría en su propio aislamiento —con sus parejas, familiares y mascotas— tratando de entretenerse, sin mayores pretensiones y en muchos casos, vestidos para estar en casa. También he visto videos del heroico personal de salud, de los aplausos y la convivencia en cuarentena, de las calles o lugares turísticos vacíos y, parte del ángel que siento es que me parece que son personas como tú y yo. Aunque TikTok fue pensada como una aplicación para jóvenes menores de 30 años, con el tiempo, las otras décadas nos hemos ido sumando y, en la actualidad, hay hasta abuelos de más de cien años bailando con sus bisnietos y así. Desde Tom Jones, Electric Light Orchestra y Shakira hasta tendencias actuales pasando por rumba y salsa y mil cosas más, hay toda una variedad para cada gusto. Mis favoritos hasta ahora son este reto de Dua Lipa que me encanta y el que da título a este texto —la canción de Chinese New Year—, que en esta versión me parece todavía mejor.
Y tú, ¿te animas a hacer tu video?

Comentarios

  1. "La vida también transcurre afuera", me dijo un amigo sorprendido por el interés de muchos de nuestra generación (ermitaña, dice él) en acercarse al arcón de herramientas de autoventaneo. Conociendo mis dotes artísticas (y mis dos pies izquierdos), todavía agradezco que esos aspectos queden reservados para la intimidad (y la sonrisa) personal. 2020.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Día 49: en Orihuela

/moders dei/

Día 47: el tacto